Con el fin de poderse acoplar a los planes personales de cada pareja, decidimos que el punto de encuentro seria el propio Gran Hotel de Avignon a la hora de cenar y allí se fueron encontrando los participantes a lo largo de la tarde.

 

El sábado lo dedicamos a descubrir el impresionante “Palacio de los Papas” que por su grandeza, su riqueza constructiva y los casi infinitos añadidos que fueron realizando los grandes Señores de la Iglesia nos dejó profundamente impresionados, siguiendo después descubriendo preciosos rincones de la ciudad (tiendas incluidas) hasta llegar al célebre “Puente de Avignon” que recorrimos y contemplamos.

 

 

Regresamos a buscar los coches para irnos a Saint Remy de Provence a buscar el pequeño restaurante con 1* Michelin, en donde disfrutamos de un almuerzo excelente en un agradable “porche”. De allí a buscar el arco romano de la ciudad y a Les Baux de Provence aparcando los coches y con la idea de “Al Castillo “en lo alto de la ciudad, nos perdimos por las preciosas calles de la villa/fortaleza disfrutando de las vistas sobre toda la región.

 

Descenso a la ruta que nos llevó a la Abbaye de Montmajour para contemplar (no se visita en estas fechas) el poderoso edificio románico que con su esplendor domina toda la región e imaginarlo en su historia, apoyando a la ciudad de Avignon. A la que regresamos para un descanso y la tranquila cena en el hotel y la preparación de la actividad del domingo,

 

El domingo nos dirigimos a Vaison la Romaine para visitar su templo románico cercano al rio y dirigiéndonos a la ciudad alta, aparcando los Porsche al lado del rio y subiendo a la ciudad alta para disfrutar de su vista y sus tiendas.

 

 

Regresamos al rio e iniciamos la ruta que nos llevaría a disfrutar de la subida al Mont Ventoux en la que dimos vía libre a la potencia de los coches para vivir las sensaciones que ello nos procura. Ruta preciosa sin casi coches en sentido contrario.

 

 

Parada en el mirador anterior a la cumbre, fotos de rigor y vertiginoso descenso hasta la villa de Sault para disfrutar de un excelente almuerzo en su plaza mayor, en un ambiente relajado y dispuestos a descubrir las vertiginosas Gorges de la Nesque.

 

Regresamos a la ruta principal para mostrar a los que no la conocían, la atractiva ciudad (aunque estuviesen sus tiendas ya cerradas) de Isle sur la Sorgue y de allí, por rutas vecinales, regresamos al hotel para la cena y el merecido descanso.

 

 

El lunes, lloviendo a mares, cargamos los equipajes y salida hacia Nimes y Montpellier para dirigirnos a Saint Jean de Vedas para visitar Almeras Frères y como por la lluvia nos retrasamos, pactamos la visita para las 14h y fuimos a disfrutar de un excelente almuerzo en un precioso restaurante del lugar.

 

De allí al gran garaje de los hermanos Almeras en donde vivimos el ambiente de Porsche super especiales para carreras de resistencia por todo el mundo, ya que en ese momento estaban preparando dos coches para ir a Austin (USA). Prueba de su gran experiencia y éxito es el apoyo que les presta Chopard como sponsor (No hay que olvidar que el propietario de Chopard, Sr. Schaufele, corre con un Porsche 550 junto con Jacq Ix en las Mille Miglia de Brescia).

 

 

Los dos Almeras y uno de sus hijos, aparte de atendernos personalmente, nos enseñaron su colección privada de Porsche, desde las primeras series. En resumen: una gozada.

 

Allí nos despedimos para tener cada uno libertad de regresar empleando el tiempo que mejor le encajase hasta llegar a los puntos de origen, emplazándonos a vernos de nuevo en la del 14 de noviembre

 

Una preciosa salida, que será difícil de olvidar.

Andreu Casas

Presidente